El pasado jueves por la noche, Natalia llegó a su casa, se sentó delante del ordenador, y descubrió la fotografía del cuerpo sin vida del niño sirio de tres años, Aylan Kurdi, tumbado boca abajo, en la orilla de la playa… Reconoce que su primera reacción fue llorar como una magdalena, pero también que apenas tardó unos minutos en reaccionar. “¡Hay que hacer algo!”. Y en vez de limitarse a comentar lo que está pasando o sentarse en una terraza a criticar la pasividad de los gobiernos (que también), decidió poner en marcha una Caravana Solidaria de Ayuda Básica a Budapest.

   Natalia Álvarez (retratada aquí) es decoradora, propietaria de una empresa de interiorismo y madre soltera de una niña de 22 años y de dos labradores. No le sobra el dinero, pero dedica todo el tiempo que puede a pequeñas ONGs e iniciativas solidarias, que hacen la vida más llevadera a los que menos tienen. Así que, esa misma noche, para poder recopilar productos de primera necesidad, ropa de abrigo, medicamentos y mantas, y llevárselos a los refugiados sirios, diseñó una página web, y empezó a moverla por Facebook entre sus amigos más cercanos.

   La primera llamada que hizo fue a una clienta a la que actualmente está reformando un loft en el barrio de Quintana (Madrid), para pedírselo como almacén. La respuesta fue un sí rotundo. Después, llamó a su hija Alejandra, y le propuso cruzar Europa en furgoneta con su madre para llevar todo el material que fuesen capaces de recopilar. Alejandra (que termina sus exámenes el día 17 de septiembre) no lo dudó un momento, y su amiga María, que estudia oposiciones, recibió su propuesta a las 6h30 de la mañana, y a las 8h30, había diseñado un logo para la campaña y abierto una página en Twitter. El viernes por la mañana, el teléfono de Natalia empezó a sonar, y desde entonces, no ha parado.

   Lo que no podía imaginar es que tres días después, 1.700 personas, que se habían enterado de su iniciativa a través de las redes sociales, habían aparecido en la Calle de Federico Gutiérrez, 25, con maletas cargadas de ropa de abrigo, mantas, botas, ropa de bebé, medicamentos… “Yo sabía que si utilizaba las redes adecuadamente, podía montar “la mundial”. Y así ha sido, son un arma muy poderosa” afirma Natalia, que no ha dejado ni un momento de atender a la gente que llega al almacén, de ordenar lo donado hasta la fecha y de hablar con los medios de comunicación.

   Hasta el momento, son 4 vehículos, conducidos por tres mujeres y un hombre, que partirán el 17 de septiembre hacia Budapest. El viaje, que durará tres días, se lo financiarán ellos mismos, y cargarán con todo lo que puedan, pero sobretodo, productos de primera necesidad: “Aunque sabemos que los refugiados avanzan hacia Austria y Alemania, son muchos los que aún siguen llegando a Budapest sin nada, y nuestra idea es equiparles. Así que, en un principio, será nuestro destino”.

   Basta con ponerse en la piel de los hombres y las mujeres que escapan de Siria, y alcanzan como pueden las costas de Grecia, para viajar a pie hasta Hungría vía Macedonia: “Solo pensar en que van dejando todos sus enseres por el camino y que llevan en sus brazos a sus hijos… Pronto bajarán las temperaturas, y el invierno en Alemania será duro. No hay tiempo que perder”. A estas alturas Natalia está en contacto con ONG’s locales de Budapest, para colaborar y enterarse de las necesidades reales que se tienen actualmente: “Falta agua embotellada, chubasqueros, pañales, toallitas, sillas plegables para bebés, biberones… Hace falta de todo cuando se parte de cero”.

   La gente sigue llegando cargada con maletas llenas de enseres, y Natalia no puede dejar de sonreír: “Lo que nos diferencia a unos de otros no es el lenguaje, ni la nacionalidad, ni el color de la piel. Hay gente buena y gente mala. Los malos hacen mucho ruido, pero los buenos somos más, y nuestra respuesta es inmediata”.

   ¡Ojalá más gente se anime a acompañarles, y en vez de 4 coches, sean 8 los que formen la Caravana. Iniciativas como la de Natalia nos hacen creer en la solidaridad.

                                          (De Carla Pulín, el 07 de septiembre de 2015)

Referencias útiles:
CARAVANA SOLiDARiA:AYUDA A REFUGiADOS SiRiOS EN BUDAPEST

¿QUÉ? Lista (no exhaustiva) de productos básicos de ayuda inmediata, que puedes traer:
- ropa de abrigo para bebés y niños;
- pañales;
- productos de higiene básica para niños y adultos en pequeño formato para que sea fácil de repartir;
- chubasqueros (capas de agua);
- esterillas;
- sacos de dormir;
- cajas de embalaje, etc.

¿DÓNDE? Se pueden acercar las aportaciones a la Calle de Federico Gutiérrez, 25 (M Pueblo Nuevo), de 10h a 20h. Además, quien viva en el distrito Centro. puede acercárselo a Pilar Moreno, amiga de Natalia, a la Calle Rodríguez San Pedro, 2, 5ª, Oficina 504 (M San Bernardo / Bilbao), de 9h a 19h, de Lunes a Jueves.

¿CUÁNDO? Hasta el Miércoles 16  de septiembre de 2015 (el día 17, la caravana parte hacia Budapest).

Para saberlo todo de la CARVANA SOLiDARiA de Natalia (670 956 896), Pilar (609 862 322) y Sonia (616 366 730), conéctate a su web, su Facebook y su Twitter.

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