¿De dónde nos viene el esquí? ¿De Noruega? ¿De Escandinavia? ¿De Laponia? ¿Siberia? ¿Canadá? La existencia de materiales para deslizarse sobre la nieve es tan, tan antigua que nos han salido canas tan blancas como la propia nieve buscando información. Pequeña historia de una práctica milenaria.

   Hasta 1920, se creía, gracias a una pintura rupestre descubierta en una gruta cerca de Uppsala (Suecia), donde se veía a un cazador sobre unas tablas, que el inicio del esquí se había producido alrededor del año 550 d.C. Pero, un año más tarde, en 1921, unos restos encontrados en los pantanos del norte de Escandinavia hicieron que los estudiosos retrocedieran sus relojes y fecharan el nacimiento de la práctica del esquí 2.500 años antes de Cristo.

   Lo cierto es que Noruega se postula como la cuna del dominio de los copos blancos por el hombre, pero también no deja de ser verdad que tanto en Laponia como en Finlandia, Mongolia y Siberia (Rusia), hay referencias de objetos que se utilizaron para deslizarse por los terrenos nevados. Además, se cree que fue gracias a la migración de los habitantes de las congeladas tierras rusas que el esquí llegó a Alaska y Canadá, antes incluso de que Colón descubriese las Américas. ¡Una locura igual de extravagante que los relatos que narran, a lo largo de la historia, las hazañas de hombres valientes subidos a lomos de dos palos de madera fijados a sus pies con cuerdas, correas o planchuelas de hierro blando.

   Así, por ejemplo, en 1550, los equitadores de Iván el Terrible contribuyeron a liberar Rusia de los Tártaros; o en 1522, el Rey Vasa de Suecia, mientras muchos de sus compatriotas se pudrían en cárceles danesas, organizó un levantamiento que consiguió salvar a su pueblo del invasor. Para lograrlo, el monarca tuvo que escapar del Rey Christian II y llegar, en plena navidad, cuando una gruesa capa de nieve cubría el país y los esquíes eran su único modo de locomoción, a su pueblo natal en busca del apoyo de su pueblo. Por desgracia, no lo consiguió y como sus perseguidores le pisaban los talones se vio obligado a montar de nuevo en sus esquíes y huir hacia la frontera con Noruega. Entonces, arrepentidos por su cobardía, sus compatriotas decidieron actuar y mandaron a dos intrépidos mensajeros tras el Rey Vasa. El resto… se estudia en los colegios: Suecia fue liberada de la tiranía danesa. 

   En un salto mortal de trampolín, llegamos a mediados del siglo XIX que es cuando el esquí tal y como lo conocemos hoy comienza a apuntar maneras cuando se celebran, de nuevo en Noruega, las primeras carreras en las décadas de 1850 y 1860.  Apenas 23 años más tarde nace la Asociación Noruega de Esquí y el primer Campeonato internacional se celebra en 1892, también en tierra vikinga. Después, llegó el Club de Suiza, luego el de Alemania, y una cosa llevó a la otra hasta que, sin darse casi cuenta, el esquí conquistó todos los Alpes galos y más tarde, por fin, los Pirineos.

   Así, las relaciones comerciales entre países, el contacto entre viajeros, los inicios del deporte y los fenómenos de emigración hicieron que el esquí se extendiese por el centro de Europa, Canadá, Japón y Estados Unidos -adonde llegó en plena fiebre del oro y se popularizó gracias a, como no, un noruego apodado “Snowshoe”, es decir, zapato de nieve, que aceptó el encargo de trasportar durante el invierno el correo postal entre Placerville, sobre la parte oeste de la Sierra Nevada, en California, y Carson City, en Nevada. A estas alturas de la historia el mundo ya se había rendido a los encantos del transporte nevado y no habría marcha atrás, sino todo lo contrario.

   El esquí pasó a ser un deporte (en muchos casos, de élite, pero deporte al fin y al cabo), y las mejoras constantes en el material, las técnicas, la creación de estaciones de invierno y sus continuos avances y, por supuesto, la retransmisión de las competiciones a través de la caja tonta, han hecho evolucionar vertiginosamente la práctica del esquí.

   Finalmente, como tenía que ser, la palabra “esquí” también nos viene del nórdico antiguo “skíth”, que significa “trozo de leña”, que el castellano adaptó sin dificultad a su ortografía.

   ¡Feliz Año ¿esquiando?!

PD (nº1) histórica: La pieza que se encontró en los pantanos de Escandinavia fue bautizada como “el esquí de Hoting”. Actualmente se expone en el Museo del Ski de Estocolmo y es considerado como el elemento deportivo más antiguo conocido. Su reconstrucción ha servido para saber que medía 111 centímetros de largo y 19 de ancho.

PD (nº2) conmemorativa: En 1992, en honor al enorme y frío viaje del Rey Vasa, fue creada una competición de esquí, llamada “Vasalöppet” y abierta a todos los aficionados del mundo, que se disputa anualmente sobre el mismo recorrido, efectuado por Gustav Vasa y sus dos compañeros cuatro siglos atrás, entre Salen y Mora.

PD (nº3) patria: En España, el primer Club de Esquí se creó en Barcelona en 1890, el Centro Excursionista de Cataluña.

PD (nº4) de moda: Las modalidades más practicadas de esquí son el alpino, el de fondo y el de travesía. Pero, cada vez más, los esquís están dejando paso al snowboard y su freestyle... para gustos, ¡los colores!

                                      (De Noemí Z., el 30 de diciembre de 2014)

Referencias útiles:
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- Puerto de Navacerrada (también en Facebook y Twitter);
- Baqueira / Beret (también en Facebook y Twitter);
- Candanchú (también en Facebook y Twitter);
- y Sierra Nevada (también en Facebook y Twitter).

Fuentes:
- “Historia del Esquí”, de la Asociación de escuelas, Profesores y Entrenadores de Deportes de Invierno, sin fecha.
- “Historia del Esquí”, de Nevasport, 20.VII.2014.

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